Pese a que al día de hoy ya hay mayor regulación y protección hacia los menores de edad, siguen existiendo casos donde los padres forman a sus hijos a casarse a cambio de recibir un pago, tal es el caso de Anayeli quien debía contraer nupcias a lo cual la adolescente se negó.
Y el día 22 de noviembre la joven de 15 años decidió escapar de casa y esconderse en la casa de otro amigo, por lo que sus padres dieron aviso a las autoridades de su comunidad ya que ya tenían todo planeado para la boda. Al ser encontrada la joven los policías la encerraron pese a que no había cometido ningún crimen, y exigían se casara o bien que su familia regresara los 56 mil pesos su familia política ya había gastado en el evento.
Todo inicio cuando la madre de Anayeli pactó con la familia del joven un pago de 200 mil pesos por la mano de su hija, algo que ya no sucedió porque la menor decidió no aceptar este trato, lo más sorprendente es que las autoridades apoyaron esta situación e inclusive querían obligar a la menor a actuar en contra de sus deseos.
Al otro día en las oficinas de Tlachinollan se denunció a la Comisaría de Joya Real donde estaba la menor, ante esta situación donde se violentaron claramente sus derechos acudieron tanto elementos de la Fiscalía General de Estado de Guerrero como la Comisión Estatal de Derechos Humanos para que la menor fuera liberada, así como su amigo que le dio resguardo.
