La Organización Mundial de la Salud ha confirmado que los datos preliminares que se obtuvieron tras varios estudios han permitido concluir que la nueva cepa es más contagiosa que la delta, sin embargo los síntomas que desencadena son menos severos.
«También hay indicios que sugieren que ómicron provoca síntomas menos graves que delta [la variante más extendida en la actualidad], pero aún es demasiado pronto para estar seguros», añadió.
Y aunque la nueva variante ya se encuentra en casi 57 países los casos detectados no han sido de gravedad, en la Unión Europea se encontraron 212 casos que presentaron síntomas leves o los pacientes resultaron asintomáticos.